A pesar de haber asumido con un país al borde de la peor crisis de la historia, el Gobierno de Javier Milei logró resultados increíbles en su lucha contra la pobreza. La gestión económica, enfocada en políticas de austeridad, reducción del gasto público y estabilidad monetaria, comenzó a dar frutos.
Avances en la lucha contra la pobreza en Argentina
Los más recientes datos del informe elaborado por la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT) y el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) revelan una tendencia positiva en la reducción de la pobreza, lo que subraya el éxito de las políticas implementadas por el presidente.
Según el último «nowcast» de pobreza, correspondiente al semestre mayo-octubre de 2024, la tasa de pobreza en Argentina se ubicó en el 49,0%. Además, analizando únicamente el mes de octubre de 2024, la pobreza cayó al 46%.
Este es un notable descenso respecto al 57,4% registrado en enero de 2024, una cifra que reflejaba la herencia de la gestión kirchnerista, caracterizada por un alto nivel de pobreza y una economía camino a una hiperinflación. Desde enero hasta octubre, la pobreza se redujo 11,4 puntos porcentuales.
La proyección de la pobreza, que se actualiza mensualmente, está basada en los datos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) y refleja el aumento de los ingresos totales familiares (ITF) en comparación con el costo de la Canasta Básica Total (CBT) del Gran Buenos Aires, que es uno de los principales indicadores de la pobreza.
El aumento de los ingresos y la reducción de la indigencia
El incremento en los ingresos de los hogares, que para el semestre mayo-octubre de 2024 proyectó un aumento interanual del 175% en los ITF, fue fundamental para aliviar las dificultades económicas de millones de argentinos.
Este aumento de ingresos superó el crecimiento de la canasta básica, lo que permitió una estabilización en los precios de bienes esenciales y contuvo la pobreza en niveles más bajos de lo esperado. De hecho, la pobreza descendió de manera consistente desde principios de 2024.
El «nowcast» de pobreza también refleja una disminución progresiva en la indigencia, que bajó al 15,1% durante el semestre mayo-octubre, evidenciando que las políticas de reducción de la inflación y los aumentos salariales reales están dando resultados concretos.
Reformas estructurales y su impacto en la economía
Estos avances son producto de las reformas estructurales que el Gobierno de Milei implementó desde su llegada, como la reducción del gasto público, la emisión cero, el superávit fiscal y el fortalecimiento de la economía a través del impulso a la inversión privada y la desregulación.
Una de las medidas más destacadas del Gobierno de Milei fue su capacidad para estabilizar el precio de los alimentos, un factor clave en la lucha contra la pobreza. La variación de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) durante el mes de octubre fue de solo un 1,4%, muy por debajo de las tasas de inflación previas, lo que permitió a más familias acceder a los productos esenciales sin caer en la indigencia.
Los datos del INDEC y la UTDT reflejan una realidad optimista: Argentina está comenzando a superar las secuelas de la peor crisis económica de su historia reciente.
Los efectos de la inflación y la pobreza, que fueron legados por la administración anterior, están siendo eliminados gracias a las medidas del presidente Milei. Si bien la pobreza sigue afectando a millones de argentinos, las proyecciones son claras: el rumbo económico de este gobierno logró frenar el avance de la pobreza y está sentando las bases para una recuperación económica sostenible.
Gracias a esto, se espera que la pobreza siga disminuyendo en los próximos meses, mejorando la calidad de vida de millones de ciudadanos. El Gobierno de Javier Milei demostró que, con políticas liberales, se pueden obtener resultados concretos, incluso en medio de los desafíos más difíciles.
La reducción de la pobreza no es solo una promesa, sino una realidad tangible bajo la nueva administración libertaria, marcando una nueva era para Argentina.
Fuente: Derecha Diario